Personas tóxicas. ¿Qué impacto generan en los entornos laborales? Marga Pérez

No podemos elegir a los compañeros de trabajo y en ocasiones tenemos a nuestro alrededor personas que con su comportamiento pueden influir negativamente en nuestro equilibrio emocional. Si los identificamos, podemos analizar la forma en que nos afecta su comportamiento. Las personas tóxicas en el trabajo se determinan como una de los principales motivos de desgaste en los equipos, con un impacto negativo en el clima laboral y en el bienestar personal de los miembros del grupo.
"No permitiré que nadie camine por mi mente con los pies sucios"
- Mahatma Gandhi -
Existen diferentes tipos de personas tóxicas y ante cada una de ellas podemos establecer diferentes estrategias para evitar su impacto en nosotros. ¿Qué define a estas personas y como se caracterizan?
- El eterno enfadado vive en la queja continua, no es capaz de gestionar sus emociones y es bastante inestable. No hay que dejarse llevar por su negatividad y relacionarse solo cuando esté relajado.
- Con el testarudo será difícil llegar a acuerdos, sus ideas son las buenas, así como sus propuestas o sus planes de trabajo. Suele funcionar un lenguaje positivo, la asertividad y plantear alternativas win-win.
- El tóxico envidioso intenta rodearse de personas que le apoyen y la influencia con sus malos pensamientos, desea lo que consiguen los otros y sus sentimientos son de infelicidad constante.
- Hay quien se caracteriza por un comportamiento abusivo, humilla al otro, extralimitándose y aprovechando cualquier situación en beneficio propio. No responder a sus estrategias y no darnos por vencidos, mantener la calma, resistirse a sus tácticas y no provocar el conflicto. En ocasiones estos comportamientos se dan en el jefe, exige resultados imposibles y no deja de presionar a sus colaboradores. Ante el jefe explotador, utilizar la asertividad y darle evidencias para establecer objetivos realistas y sobretodo no agobiarse.
- El compañero manipulador y mentiroso, no se puede confiar en él, puede ser difícil de detectar ya que puede ser muy amable, sus acciones se enfocan en sus propios intereses. En estos casos, hay que ser persistente en el seguimiento de tus propias actividades, sin agobios pero si con control.
- El jefe autoritario, inseguro que intenta controlar a los colaboradores generando miedo y un control excesivo. Has de centrarte en tus competencias, piensa en lo que haces bien.
En estas situaciones lo importante es tomar el control, mantener la calma y poner distancia con estas personas, intentar no involucrase emocionalmente. Ser asertivo, poner límites sin agresividad, siendo claro y transparente, centrándote en la solución no en el problema.
Si la negatividad te persigue, plantéate si eres tú el causante de la misma. En caso que seas tú la persona tóxica, empieza a trabajar en tu autoconocimiento, identificando las causas de tu comportamiento y definiendo alternativas al mismo. En caso de que seas la víctima, el primer paso es limitar el tiempo de contacto con estas personas, unido a modificar tus pensamientos y comportamientos. Nunca se ha de ignorar el problema, establece límites, se asertivo en la exposición de las consecuencias negativas.
"Aléjate de la gente que intenta empequeñecer tus ambiciones. La gente pequeña siempre hace eso, pero la gente realmente grande te hace sentir que tú también puedes serlo"
- Mark Twain -